RIAS Baixas: destino albariño

Rias Baixas

Bañadas por las olas del mar que se introducen en sus costas y playas con un vaivén de agua y sal, lluvia y sol, las Rías Baixas que se extienden a lo largo de la costa atlántica de Galicia se han convertido en un cotizado destino de viaje no sólo por su riqueza natural e histórica, sino también por la popularidad de su uva estrella, la albariño, y los vinos blancos con que deleita a millones de personas de todo el mundo.

Tierra por excelencia entre monte y mar, las Rías Baixas ofrecen al viajero una amplia despensa de experiencias de sabor, cultura, naturaleza, deporte, fiestas populares, arquitectura, botánica y relax que convierten al territorio en un completo destino en el que construir rutas temáticas para todos los gustos, hilvanadas por los vinos de la región.

El vino albariño de Rías Baixas es el eje de esta comarca en la que pueden visitarse decenas de bodegas para pasear a la sombra de sus parrales, admirar el progreso de las uvas y conocer los secretos de elaboración del vino blanco español más vendido en Puerto Rico, degustando muchas de las etiquetas más apreciadas por los consumidores de la Isla.

Ubicado en la ría de Arousa, el pueblo costero de Cambados es el eje del Valle del Salnés, la principal área productora de Rías Baixas. En Cambados hay un Museo del Vino, excelentes vinotecas, restaurantes que sirven los más frescos frutos de mar, y un conjunto histórico artístico encabezado por el céntrico Pazo de Fefiñanes. Cada primer domingo de agosto tiene lugar en Cambados la fiesta grande del vino albariño, una celebración multitudinaria que, como fiesta de interés turístico internacional, el año pasado atrajo a unas 250 mil personas y este 2023 celebrará sus 70 años el 6 de agosto.

La Festa do Albariño no es la única exaltación a los sabores de Rías Baixas. El Condado de Tea, a orillas del río Miño y otra de las subzonas de la DO Rías Baixas, tiene su propia fiesta del vino, otra del requesón y su miel, y es también un destino gastronómico con la ruta de la lamprea, que pone en valor las labores de pesca y gastronomía alrededor de este pez ancestral, de temporada y considerado un manjar con el que los blancos y tintos de Rías Baixas armonizan muy bien.

Para fiestas también las de O Rosal, subzona entre el Atlántico y el Miño, donde en julio tiene lugar la Feria do Vino do Rosal, fiesta de interés turístico que promueve no sólo los vinos, sino también los productos agrícolas típicos y conserveros de la zona. La Feria se complementa con actividades culturales y artísticas e incluso una carrera por los viñedos.

En O Rosal visitas indispensables son el castro celta de Monte Trega, con gran valor arqueológico, religioso y paisajístico, y A Guarda, un puerto pesquero con playas y un bonito casco urbano, además de una exquisita oferta gastronómica cimentada en los más deliciosos frutos de mar que llegan a su puerto y que también inspiran fiestas de cocina marinera.

Si A Guarda deleita con su sabor a mar y Arbo, en el Condado de Tea, es el paraíso de la lamprea, O Grove en la ría de Arousa es otro destino obligado para los amantes del pescado y marisco. En esa misma ría de Arousa está también Sanxenxo, otra ciudad turística que es destino vacacional por excelencia y conocido por su puerto y las regatas de vela que lo tienen por punto de partida.  

En el Salnés hay experiencias gastronómicas como las visitas a conserveras de pescado y a las bateas donde se crían los mejillones, y donde estos moluscos pueden incluso degustarse acompañados de refrescantes copas de albariño y otras variedades autóctonas de la DO Rías Baixas, armonía perfecta de km. 0 para los frutos de mar en los que Rías Baixas se prodiga.

Quienes amen la naturaleza y la arquitectura pueden visitar el Monasterio de Armenteira, desde donde los monjes expandieron el cultivo de la albariño, y la plácida ruta de la piedra y el agua, no lejos de allí.

Con una copa de vino en mano también pueden visitarse los pazos señoriales que abundan por Rías Baixas, conociendo su historia, arquitectura y riqueza botánica y artística, además de las viñas que les rodean. Construcciones señoriales con aire palaciego, el granito con que se edifican los pazos se enlaza con el suelo donde nacen las uvas, confiriendo a los vinos un carácter fresco y vibrante.

Algunos de estos pazos históricos son el de Rubianes, un tesoro de jardines y arte, con aire francés y bodega boutique; Fillaboa, a orillas del Miño y con una colección de arte; Pazo Baión, un proyecto grande de viña continua, jardines escultóricos, bodega y vinos premium, como lo son también los elaborados en el Pazo Señoráns, un pazo del siglo XVI o el mismo Pazo de Fefiñanes, todos con bodegas que permiten conocer sobre elaboración de albariño y degustarlo reposadamente, recreándose en la hermosura e historia de los espacios.

La oferta vínica y lúdica de las Rías Baixas hoy es más cercana a los viajeros gracias a su proximidad al Camino Portugués, una ruta que atraviesa la región y es cada vez más popular entre peregrinos que hacen el Camino de Santiago.

Quienes arriben en crucero al puerto de Vigo también pueden disfrutar del esplendor de las Rías Baixas con excursiones terrestres que visitan ciudades como Pontevedra, realizan paseos en barco y degustaciones de frutos de mar y vino, además de visitas a las bodegas, a las que puede también llegarse desde Santiago de Compostela, donde regularmente salen recorridos grupales, tanto en transportes privados como en tren, estos últimos gracias a los trenes turísticos de Galicia, que este 2023 estrenan varias salidas durante la temporada veraniega que permiten admirar el paisaje de las rías, visitar alguna bodega, degustar sus vinos, conocer Cambados y pasear en barco.

No lejos de Santiago de Compostela está también la Ribeira do Ulla, una de las subzonas de la DO Rías Baixas donde también hay bodegas que visitar, ofreciendo una oportunidad para comparar perfiles de vino elaborados con las mismas variedades autóctonas presentes en otras zonas.

Para quienes deseen experiencias de viajes más prolongadas, hay también algunos hoteles rurales en pleno territorio de viñas, con el vino y la gastronomía como ejes de su oferta, además de hoteles de bodegas como el Nande, de la Bodega Señorío de Rubiós, el Pazo de Almuiña de Adegas Galegas o Casa Beatnik, con su propia bodega boutique.

Para más información sobre experiencias turísticas en Rías Baixas y visitas a sus bodegas: www.doriasbaixas.comwww.rutadelvinoderiasbaixas.comwww.turismo.galwww.santiagoturismo.com y https://www.renfe.com/es/es/experiencias/trenes-tematicos/trenes-turisticos-galicia