29 de marzo de 2022
Mensaje de Situación del Estado del gobernador de Puerto Rico, Pedro R. Pierluisi.
Señor Presidente de la Cámara de Representantes, señor Presidente del Senado y demás miembros de la Asamblea Legislativa; señora ex Gobernadora; distinguidos miembros del Tribunal Supremo de Puerto Rico, señora Comisionada Residente, alcaldes y alcaldesas, señor Secretario de Estado y demás oficiales del gobierno de Puerto Rico y del gobierno federal, distinguidos invitados,
.. y en especial, hermanas y hermanos puertorriqueños por quienes trabajo a diario y cuyo bienestar y progreso guían mis pasos.
Conforme al mandato constitucional, comparezco ante esta Asamblea Legislativa y le presento a nuestro pueblo mi segundo Mensaje sobre la Situación del Estado.
Mientras el mundo entero se encuentra unido en el rechazo a la guerra injustificada de Rusia contra Ucrania, nuestro pueblo también se une en oración en apoyo a nuestros hermanos ucranianos y a todos los amantes de la paz y la democracia. Este terrible conflicto bélico ha repercutido alrededor del mundo con grandes implicaciones sobre nuestro diario vivir, incrementando el costo del petróleo, afectando al pueblo y al comercio, y creando inestabilidad en los mercados financieros nacionales e internacionales.
Puerto Rico, nuestro pueblo, también quiere y necesita paz. Nuestra gente busca certeza, estabilidad y unión de propósito.
La historia de nuestro pueblo se está escribiendo con nuestras acciones y con nuestras obras. Cuando ponemos el bienestar de nuestro pueblo primero, podemos lograr grandes cosas.
Soy estudioso de la historia y me interesan las biografías, pues de ellas se aprende mucho sobre cómo las personas han atendido retos y logrado sus éxitos. Recuerdo al Presidente Lyndon B. Johnson, quien fue un luchador por la igualdad racial en Estados Unidos y promovió todo un programa abarcador de beneficencia social llamado la Gran Sociedad. Una de sus citas con la que me identifico dice así:
“No hay problemas que no podemos resolver juntos y muy pocos que podemos resolver solos”.
Así mismo me siento yo ante esta gran responsabilidad que ha puesto nuestro pueblo sobre nuestros hombros. Estoy seguro de que ustedes aquí en la Asamblea Legislativa, los alcaldes y alcaldesas y los jefes de agencia, también comparten ese sentido de responsabilidad.
Porque trabajar por Puerto Rico es un privilegio y me levanto todos los días, agradecido de Dios y del pueblo por la oportunidad que tengo de dirigir a nuestro gobierno. Y les confieso que es precisamente por ese agradecimiento que tengo la paz, tranquilidad y seguridad para hacer el trabajo necesario en estos momentos de mares turbulentos.
El año pasado estuvimos enfocados en las crisis que hemos tenido que enfrentar: la pandemia del COVID, la quiebra del gobierno, los recortes presupuestarios, los reclamos justos de servidores públicos y la reconstrucción pendiente. Este año, aunque todavía tenemos muchos retos por delante, podemos hablar del futuro, de un mayor control de la pandemia, del fin de la quiebra, de inversión en nuestra gente, de un gobierno con mayor eficiencia, de obras de infraestructura por toda la Isla y de la promoción de nuestro desarrollo económico.
Y podemos mirar al futuro con gran optimismo, porque el potencial de Puerto Rico está a nuestro alcance.
Hoy ya estamos cumpliendo con nuestras obligaciones de forma sostenible, invirtiendo en nuestras prioridades, asegurando las pensiones de nuestros retirados y renovando nuestro gobierno para servirle bien a nuestra gente.
La confirmación del Plan de Ajuste de Deuda del Gobierno es el paso más trascendental que hemos dado hacia la recuperación económica de nuestra Isla. Es un logro que todos compartimos, pues esta Asamblea Legislativa también dio un paso al frente y logró aprobar legislación esencial para hacerlo posible. Ahora estamos encaminados a regresar al progreso que todos y todas esperamos y merecemos.
El acuerdo es bueno para Puerto Rico, limpia nuestro crédito, protege a nuestros pensionados, y devuelve sus ahorros a decenas de miles de servidores públicos, como Karen Santos de ASUME, que ya recibieron el dinero en sus cuentas. ¡Enhorabuena Karen!
Muy importante también, reduce significativamente la deuda de nuestro gobierno de $33 mil millones a $7,500 millones, una reducción de casi un 80%; y de tener que pagar 25 centavos de cada dólar que ingresaba el gobierno, a solo gastar 7 centavos de cada dólar en la deuda.
Al mismo tiempo hemos tenido grandes logros económicos y fuimos estratégicos a la hora de asignar los fondos federales para mitigar el efecto de la pandemia en la salud pública y en la economía. Hemos visto un alza sostenida en prácticamente todos los índices de actividad económica durante el pasado año. Tan es así que el Banco de la Reserva de Nueva York resaltó que Puerto Rico ha sido la jurisdicción que mejor se ha recuperado en nuestra región, destacando la baja en el desempleo y nuestro crecimiento económico.
En enero pasado, la tasa de desempleo en Puerto Rico era de 9 por ciento. En este momento la tasa está en 6.8 por ciento, la más baja en toda nuestra historia. Y no se equivoquen, no es porque hay menos población, pues la fuerza trabajadora se encuentra en 1,215,000 personas, algo que no veíamos desde el 2011, y tenemos 1,132,000 personas empleadas, un nivel de empleo que no teníamos desde el 2007. Más aún, la tasa de participación laboral, que rondaba en 39 por ciento en el 2020, hoy se encuentra en 44.7 por ciento. Hay trabajo y oportunidades para todos.
A esta fecha, el Departamento de Hacienda ha recibido 12% más planillas que el año pasado y ya ha pagado más de $800 millones en reintegros. ¡Gracias por ese trabajo secretario Francisco Parés, y Feliz Cumpleaños!
Conjuntamente, le declaramos la guerra a la pobreza. Juntos, ustedes y yo, logramos una ley para aumentar el salario mínimo a nuestra fuerza laboral. Además, junto a la Comisionada Residente, gestionamos un apoyo sin precedente de parte del gobierno federal en el Plan de Rescate Americano, el cual provee que asuma tres cuartas partes del costo del crédito por trabajo robusto que ahora le estamos ofreciendo a nuestra clase trabajadora.
Además, logramos que el Presidente Biden cumpliera su palabra e incluyera a todas las familias de bajos y medianos ingresos en Puerto Rico en el programa de Crédito por Menor Dependiente. Esto va a significar que nuestras familias reciban un cheque de hasta $3,600 por cada menor, lo que tendrá un impacto enorme en su situación económica y en su calidad de vida.
Aquí nos acompaña Patricia Ramos Ortiz, madre trabajadora jefa de familia que gracias a estos dos programas recibió $6,500 por el crédito al trabajo en su planilla estatal y un cheque de $9,000 del gobierno federal por sus tres hijos menores de edad, para un total de $15,500. Eso representa un aumento en sus ingresos de un 75 por ciento. La vida de su familia va a cambiar. ¡Mucho éxito Patricia!
Y mi administración está trabajando para asegurar que cuando nuestra gente recibe un ingreso mayor, a raíz del incremento en el salario mínimo, sigan cualificando para los programas de beneficencia social. Vamos a luchar para que nadie se perjudique por trabajar!
Al mismo tiempo, seguimos promoviendo nuestra economía, dedicándonos a lograr que todos los sectores productivos de Puerto Rico vuelvan a progresar.
El pasado año tuvimos números impresionantes en el turismo. Antes, a Puerto Rico se le consideraba un destino para venir en invierno, pero ya estamos viendo como la Isla es visitada durante todo el año. Tuvimos un 16% de aumento en ingresos al fisco por la industria turística y un 35% en ingresos por estadías – números más altos que antes de la pandemia. Es más, tuvimos varios meses en que las llegadas al aeropuerto de San Juan superaron 550 mil personas por mes y también vimos aumentos en la llegadas internacionales.
Además de las aperturas y reaperturas de diversos hoteles, así como casinos, hemos logrado desarrollar un ecosistema de alquileres a corto plazo a través de toda la Isla que está redundando en gran actividad económica en todos nuestros pueblos, desde las costas hasta las montañas. Cada vez más, nuestros visitantes quieren experimentar todos los rincones de Puerto Rico.
Es claro que el turismo es un pilar de nuestra economía con gran potencial de crecimiento y por eso seguiremos invirtiendo en esta industria junto a la Compañía de Turismo, el DMO y el Distrito de Convenciones. Y para continuar construyendo sobre estos logros, asigné sobre $150 millones de fondos ARPA para renovar nuestras atracciones turísticas, fomentar la economía del visitante, promover a Puerto Rico como destino turístico y de inversión, y ayudar en la recuperación de nuestras instituciones culturales – porque yo defiendo nuestra cultura y siempre la voy a apoyar y exaltar.
Todos esos esfuerzos en el turismo van de la mano de la promoción de Puerto Rico como destino de inversión. El Departamento de Desarrollo Económico, así como Invest PR, han tenido grandes éxitos promoviendo el establecimiento de nuevas empresas locales y extranjeras, incluyendo en la antigua base Roosevelt Roads.
En lo que va de nuestro mandato sobre 115 empresas han confiado en Puerto Rico con una inversión nueva de más de $500 millones y sobre 8,000 empleos directos. Podemos mencionar algunas como Honeywell, Aurobindo, Stryker y CyttoImmune. Y continuamos estrechando lazos comerciales en jurisdicciones internacionales, como la República Dominicana y España, para seguir promoviendo la exportación de productos y servicios profesionales y atrayendo nueva inversión a la isla.
Todo esto es parte de nuestra estrategia abarcadora y multisectorial de desarrollo económico para lograr que Puerto Rico sea el mejor lugar para vivir, trabajar, invertir y retirarse. Eso incluye una reforma real a nuestro sistema contributivo que amplíe nuestra base contributiva y que propenda el crecimiento de nuestra economía.
A través de un comité multisectorial de expertos, liderado por nuestro Secretario de Hacienda, simplificar el sistema contributivo, facilitar su cumplimiento, incentivar productividad, lograr que el mismo sea más justo para todos los contribuyentes y asegurar los recaudos obtenidos de las empresas foráneas. La meta es que Puerto Rico se convierta en una jurisdicción de bajos impuestos para todos.
El DDEC sigue mejorando nuestro ambiente de negocios para todo el sector productivo de la Isla. Estamos avanzando en las mejoras al sistema de permisos, y hemos logrado eliminar los atrasos para miles de negocios y proyectos. Los números no engañan, para diciembre del 2020 había un atraso de sobre 11,500 permisos, y hoy solo 2,600 están pendientes.
Podemos también decir que le hemos declarado la guerra a la ineficiencia gubernamental, enfocándonos en facilitar la interacción de nuestro gobierno con la gente y los comercios. Creamos el sistema IDeal que elimina la necesidad que una agencia le pida a una persona o empresa documentos que ya el gobierno tiene.
Ampliamos los servicios del CESCO digital que ahora permite tomar el examen de licencia de aprendizaje, hacer traspasos de autos, pagar multas y renovar la licencia de conducir para recibirla por correo. Y el próximo paso, para este verano, serán los marbetes electrónicos que también vendrán a simplificarle la vida a nuestros conductores.
A la par del trabajo para un desarrollo económico sostenible, estamos llevando a cabo el programa de mejoras capitales y de resiliencia más completo que habrá visto Puerto Rico. Obra permanente que va a servir de zapata para esa prosperidad que todos queremos.
Con mucho esfuerzo hemos logrado que la relación y colaboración entre mi administración y el gobierno federal sea la mejor. Durante los pasados meses, hemos llevado las necesidades de nuestra Isla a la Casa Blanca y ante las agencias federales, y hemos visto los resultados.
Se eliminaron las trabas que existían para el desembolso de los fondos federales y continuamente vemos anuncios de fondos adicionales para la Isla, de reconocimiento a nuestra administración por el manejo de programas particulares, y de visitas de miembros del gabinete del Presidente Biden a Puerto Rico, como la del día de hoy de la Secretaria del Departamento de Vivienda federal, mi amiga y ex colega Marcia Fudge.
Y gracias a ese apoyo, son muchos los logros de nuestro Departamento de la Vivienda. Por ejemplo, bajo el programa de Financiamiento de Pequeñas Empresas, hemos desembolsado sobre $73 millones a casi 1,700 dueños de pequeñas empresas alrededor de la Isla para asistirles a progresar.
Bajo el programa de R3, de alrededor de 500 viviendas que se habían reparado previo a nuestra administración, ya hemos logrado la reconstrucción, reparación o reubicación de los hogares de más de 4,100 familias, como la de Vangie Betancourt que ya tiene su hogar renovado.
Y ahora, a todos estos hogares les vamos a poner cisternas y sistemas de energía solar para que reduzcan sus costos de luz.
Bajo el programa de Asistencia Directa al Comprador y con un desembolso de más de $52 millones, de 61 casos que se habían atendido en 2020, ya hemos ayudado a sobre 2,000 familias como la de Jennifer Laboy Silva, quien nos acompaña hoy y acaba de lograr el sueño de comprar su casa. ¡Felicidades!
También con el programa de Subsidio de Alquiler le hemos provisto ayuda para el pago de renta a más de 1,700 participantes y con el Programa de Asistencia para Renta desembolsamos sobre $125 millones para el pago de renta, luz y agua, atendiendo así las necesidades de sobre 47,000 familias puertorriqueñas.
Además, cumpliendo mi compromiso de que los fondos llegarán a todas nuestras comunidades, asignamos sobre $1,100 millones al programa City Rev para la recuperación y revitalización de los cascos urbanos alrededor de la isla. Y ya se han firmado los acuerdos con los 78 municipios y se han aprobado 229 proyectos.
En cuanto a los fondos de FEMA, en el pasado año, COR3 logró un progreso significativo para mover los proyectos de Obra Permanente. De 510 proyectos que estaban encaminados al iniciar nuestra gestión, ya para diciembre del 2021, teníamos 3,177 proyectos en curso, con un valor de $2,700 millones.
Y nuestra proyección es que para este año, no menos 2,000 proyectos estarán en etapa de construcción.
El enfoque del COR3 es también adelantar los proyectos para la reconstrucción por los terremotos en el sur de la isla, incluyendo 145 escuelas. Esto se une a que logramos que el Gobierno Federal aumentara la aportación de FEMA para los proyectos de reconstrucción de 75% a 90%, lo que supone un ahorro de más de $150 millones a nuestro gobierno.
Más aún, en cuanto a nuestras carreteras, el Departamento de Transportación y Obras Públicas y la Autoridad de Carreteras y Transportación, lograron obligar todos los fondos federales disponibles, los de años pasados y los corrientes. Durante el 2021, se desembolsaron sobre $263 millones para trabajos en nuestras carreteras y asignamos $50 millones adicionales para reparaciones y mantenimiento.
Se han depositado 367 mil toneladas de asfalto en el Programa de Abriendo Caminos por todo Puerto Rico, se han hecho sobre 30 subastas para una inversión estimada de más de $200 millones, se ha adelantado el proceso para completar la carretera PR-10 de Utuado a Adjuntas y se comenzó el proceso ambiental de las extensiones de la PR-5 y la PR-22.
Este año Puerto Rico recibirá $173 millones adicionales de la Administración Federal de Carreteras para cubrir necesidades de nuestra infraestructura vial, como parte de una histórica asignación de $901 millones para reconstruir caminos y carreteras, y $225 millones para el reemplazo y reparación de puentes durante un período de cinco años. Y con parte de esos fondos, podremos construir una red de cargadores para vehículos eléctricos y promover la compra de carros híbridos y eléctricos.
Otra área en la que hemos tenido grandes logros es en las mejoras a nuestra infraestructura de acueductos y alcantarillados. En varios meses del 2021 tuvimos subastas de nuevos proyectos con inversiones que sobrepasaron los $100 millones mensuales. Esto incluye trabajos en municipios que llevan años con dificultades para recibir el preciado líquido, tales como Camuy, Hatillo, Naranjito y Morovis.
Tenemos 26 proyectos importantes en construcción con una inversión de sobre $200 millones para obras como la nueva represa de Hatillo y Camuy, el reemplazo de la tubería Borinquen en el Caño Martín Peña, la rehabilitación de las troncales sanitarias en Salinas, Guayama, Dorado y Manatí.
Próximamente esperamos iniciar decenas de proyectos adicionales para mejorar el sistema de agua potable por todo Puerto Rico con una inversión de más de $600 millones. Estas obras van a impactar a nuestra gente por toda la Isla.
Otra parte sumamente importante de nuestra reconstrucción es la transformación y reparación del sistema energético en Puerto Rico. Todos queremos electricidad confiable y resiliente para que nunca nos falte la energía en nuestros hogares o en nuestros comercios.
En la Autoridad de Energía Eléctrica, luego de un cambio de mando necesario, se ha estabilizado el sistema de generación de electricidad y se ha establecido un plan de mantenimiento coordinado para asegurar suficiente generación y evitar apagones.
Con la APP de LUMA hemos logrado mayor estabilidad en la distribución eléctrica. A pesar de un comienzo con tropiezos, ya los abonados sin servicio están muy por debajo de los números del pasado. Se ha comenzado la reconstrucción de la red eléctrica y se han realizado más de 18,000 conexiones de abonados con sistemas de generación privada. Con esas conexiones, estamos añadiendo 99 megavatios de energía renovable y se estima que ya hay más de 300 megavatios adicionales de energía renovable en residencias privadas e industrias.
Con miras al futuro, seguiremos moviéndonos hacia las renovables para dejar de depender de combustibles fósiles que son costosos y lesivos a nuestro ambiente. La semana pasada, al fin la Junta de Supervisión aprobó los 18 proyectos que traerán al sistema 844 megavatios de energía renovable, que junto a 250 megavatios de almacenamiento en baterías, son fundamentales para cumplir con nuestra política pública energética.
Más aún, mañana estaremos anunciando las subvenciones del programa de Apoyo Energético. 888 empresas, incluyendo las de 297 mujeres empresarias y 99 jóvenes emprendedores, estarán siendo beneficiadas para la instalación de sistemas de energía solar y baterías y estaciones de carga para vehículos eléctricos. Con una inversión de $20 millones, esto les permitirá reducir sus gastos en estos momentos de alto costos energéticos y les dará resiliencia energética en caso de desastres naturales.
Pueden estar seguros de que también voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para adelantar los proyectos de generación de energía renovable, continuar la inversión en los sistemas solares en las viviendas reconstruidas y en nuestros comercios, así como impulsar la democratización del acceso de la energía renovable a través proyectos de energía distribuida con la inversión de $300 millones al Fideicomiso de Energía Verde. La transformación energética ya llegó.
Hoy ante el conflicto bélico en Ucrania, una vez más se confirma que tenemos que dejar de depender de fuentes fósiles, cuyos costos no podemos controlar y que afectan nuestro ambiente. Por eso, en lo que esos proyectos se dan, sigo tomando todas las medidas responsables para mitigar el impacto del aumento del costo del petróleo, incluyendo insistir en el uso del Fondo de Emergencia, suspender el cobro del arbitrio a la gasolina y diesel por 45 días, y proveerle apoyo financiero a la Autoridad de Energía Eléctrica. Cuento con ustedes para reducirle los costos a nuestro pueblo.
En cuanto a nuestro ambiente, he hecho asignaciones sustanciales de fondos para revitalizar nuestros balnearios y bosques, conservar los ecosistemas de las costas, y reforestar los cuencas hidrográficas. Declaré una emergencia y asigné fondos para combatir la enfermedad del tejido duro de corales, pues son esenciales para la vida marina y para mitigar la erosión costera.
Hice lo propio por la acumulación desmedida de neumáticos en nuestra Isla, activando la Guardia Nacional para asistir en el recogido de gomas, reembolsando a los alcaldes sus gastos de recogido de neumáticos y coordinando con las empresas que reciben, trituran y exportan el material.
Para resolver este asunto a futuro, el DDEC logró que una empresa puertorriqueña decidiera emprender en esta industria y ya para finales de este verano estará recibiendo cientos de miles de neumáticos para convertirlos en relleno para jardines, alfombras y pisos de goma como los que se usan en parques y gimnasios.
Aquí se encuentran con nosotros dos jóvenes puertorriqueñas, Virginia y Verónica González, que son representantes de la compañía netamente boricua que va a reciclar las gomas. Una historia de éxito para ellas, para nuestro ambiente y para Puerto Rico.
Por otro lado, un asunto imperioso que tenemos es la disposición de desperdicios sólidos por la situación actual de nuestros vertederos, algo importante para nuestros municipios, que son los llamados al recogido de la basura alrededor de nuestra Isla y son una pieza clave para mantener a Puerto Rico limpio.
Para atender este problema, al cual no se la había dado la prioridad que requiere, desarrollamos una Estrategia de Emergencia y asignamos sobre $71 millones para llevarla a cabo en estos 4 años.
Asimismo, sigo comprometido con combatir los efectos del cambio climático y de realizar acciones concertadas para mitigarlos. Luego de solicitar sus recomendaciones, acogí 87 de las 103 propuestas del Comité de Expertos y Asesores sobre Cambio Climático y referí las otras 16 a diversas agencias del gobierno de Puerto Rico que ya están en el proceso de evaluar su impacto fiscal y socioeconómico.
Vamos a lograr el balance adecuado entre la protección y conservación de nuestro ambiente y las necesidades de nuestro pueblo.
No hay duda de que Puerto Rico ha sido exitoso en la lucha contra el COVID-19. A pesar de que la pandemia no ha terminado, ahora contamos con mayor inmunidad en nuestro pueblo y con más herramientas para atender los contagios y la enfermedad. Nos mantenemos vigilantes ante cualquier posible resurgir del virus y seguimos exhortando a todos en Puerto Rico a vacunarse y a tomar las medidas de precaución individuales y colectivas para evitar contagios.
Juntos lloramos las pérdidas de vida que desgraciadamente sufrimos, y a la vez celebramos que logramos ser la mejor jurisdicción estadounidense en vacunación. Usamos la ciencia y los datos para guiar nuestras acciones con mucha prudencia y balance. Nuestro pueblo se creció en su colaboración y nuestro gobierno se lució, haciendo disponibles las pruebas y las vacunas por toda la Isla, y desarrollando sistemas de rastreo y de vigilancia genómica que nos sirvieron bien y que perdurarán para el beneficio de nuestro pueblo.
Priorizamos la educación de nuestros niños y niñas, invertimos en nuestra gente y en nuestro sector comercial, y destinamos los fondos federales para promover la recuperación e impulsar el desarrollo económico a corto, mediano y largo plazo. Hoy ya estamos saliendo de la emergencia y hemos salvado miles de vidas.
Con nosotros esta tarde tenemos a Don Juan Rivera Cabrera, quien a su corta edad de 105 años, venció el COVID gracias al tratamiento monoclonal que le proveyó del Departamento de Salud y aquí está para contarlo. ¡Denos la receta Don Juan! Que siga cumpliendo muchos más!
En la pandemia dimos cátedra, y demostramos que cuando el gobierno federal nos trata con igualdad, podemos ser los primeros.
Y es que si hay algo que la pandemia del COVID-19 hizo evidente es que las inequidades y deficiencias en el acceso adecuado a la atención médica tienen ramificaciones nefastas en todos los aspectos de nuestra sociedad. Es por eso que lograr un trato justo y equitativo en el programa federal de Medicaid, que nos ayuda a financiar el plan Vital, es indispensable para que nuestra gente, toda nuestra gente, tenga acceso al cuidado médico que necesita y merece, incluyendo a los medicamentos que necesitan.
Aunque hemos tenido grandes logros en cuanto al trato que recibimos, tanto en Medicaid como en Medicare, todavía falta mucho para que no tengamos que enfrentar deficiencias presupuestarias por los costos de salud. Por eso nombré el grupo multisectorial que nos está ayudando a seguir abogando ante el Congreso y la Casa Blanca por ese trato igual que nos merecemos en estos programas.
Como saben, en apoyo a nuestros reclamos, el Departamento de Salud federal dio un paso al frente y garantizó una asignación permanente de alrededor de $3 mil millones anuales a Puerto Rico en fondos de Medicaid.
Sin embargo, aunque tuvimos un respiro nuevamente para este año, el pareo que le aplica por ley a Puerto Rico sigue en 55 por ciento y tiene que ser ajustado para garantizar la estabilidad del programa, el cual beneficia a alrededor de 1.5 millones de personas en la isla. Agradezco al Presidente Biden que ayer incluyó en su propuesta de presupuesto la eliminación del tope a los fondos de Medicaid que recibimos.
Nuestra Comisionada Residente Jenniffer González, junto al Secretario de Salud Carlos Mellado y el grupo multisectorial seguirán inmersos en esta lucha hasta que logremos el trato igual que nos merecemos.
Por otro lado, estaremos dando paso a un sinnúmero de proyectos de mejoras capitales en las facilidades de salud del gobierno de Puerto Rico, y nos vamos a asegurar que todo municipio tenga una facilidad médica para atender a sus residentes. Quiero resaltar que luego de años de espera, ya va a comenzar la demolición del antiguo CDT de la Isla Nena y se construirá un nuevo hospital para que esté en funciones para principios del 2024. Vieques tendrá su hospital.
Como saben, aún mientras combatíamos la pandemia, establecí que la educación de nuestros niños y niñas es una prioridad indiscutible para mi administración. Nuestra visión para cumplir con nuestros estudiantes ha tenido tres enfoques.
En primer lugar, tomamos todas las medidas para que nuestros estudiantes regresaran a la escuela de forma segura. Priorizamos la vacunación del personal escolar y logramos abrir las escuelas sin contratiempos mayores.
En segundo lugar, hemos establecido programas de horario extendido en más de 700 escuelas, lo que les permite a nuestras familias trabajadoras saber que sus hijos tienen el apoyo que necesitan con estudios supervisados y programas de tutorías, deportes, bellas artes, tecnología y lenguajes, mientras ellos y ellas se ocupan de llevar el pan a sus hogares.
Hemos comenzado una revisión y modernización del currículo escolar, y estamos encaminados a aumentar a 100 las escuelas del programa Montessori, tener una escuela bilingüe en cada municipio, aumentar el número de escuelas especializadas, ampliar la oferta de estudios vocacionales y priorizar los servicios a nuestros estudiantes de educación especial.
En tercer lugar, además de un nuevo programa de mantenimiento continuo, declaramos un estado de emergencia en la infraestructura de nuestras escuelas públicas. Comenzamos asignando cerca de $300 millones para atender el defecto estructural de las columnas cortas, y ya 70% de las escuelas con esa condición han sido reparadas o están en proceso de reparación.
Establecimos un programa agresivo para impactar las escuelas afectadas por los terremotos del sur, unas 156 escuelas en 14 municipios, y de esas ya 139 han sido arregladas en su totalidad, incluyendo 7 escuelas en desuso que habilitamos para atender a nuestros niños.
Además, los módulos temporeros para atender 8 escuelas con daños severos, ya están bien adelantados, incluyendo el que ha reemplazado las escuelas Agripina Seda y Aurea Quiles en Guánica, que recientemente pude inaugurar personalmente.
Hoy 473 estudiantes están recibiendo allí el pan de la enseñanza con el apoyo de su director Rubén Cedeño Feliciano, que nos acompaña hoy y es testigo de esa gran obra. Gracias Rubén por todo lo que haces por la educación de las próximas generaciones, como lo hacen todos nuestros directores escolares y maestros en Puerto Rico.
Si la educación es clave para el futuro, la seguridad pública es indispensable para la calidad de vida de nuestra gente. Nuestro Departamento de Seguridad Pública continúa su Plan Integral de Seguridad con grandes logros, tanto en sus operativos de ley y orden como en su integración con la comunidad.
En los pasados meses, mediante el operativo continuo de 100×35, se ha logrado el arresto por delitos graves de 2 mil personas vinculadas al narcotráfico y crímenes violentos. De estos, 112 son gatilleros y 92 de los más buscados, y ayer otra vez le dieron un golpe grande al crimen.
Al día de hoy tenemos 18 asesinatos menos que el año pasado y 11 menos que el 2020. Y en delitos tipo 1, llevamos 1,158 delitos menos que el 2020.
Nuestra prioridad sigue siendo reducir los asesinatos y devolverle la tranquilidad a nuestra gente. Y para ello, seguiremos enfocados en el patrullaje preventivo en áreas calientes, en la mejor utilización de la inteligencia y en el trabajo coordinado con las policías municipales.
Continuaremos colaborando estrechamente con las autoridades federales, pues comparten con nosotros la responsabilidad de combatir la violencia, el narcotráfico y la corrupción. Lo importante es que el que le falle a nuestro pueblo, la pague.
También le declaramos la guerra a la violencia de género estableciendo un estado de emergencia como política pública.
La equidad y el respeto entre todos los seres humanos es clave para alcanzar el Puerto Rico sin violencia que todos queremos. Vamos a ponerle un PARE a la violencia y al discrimen por género que tanto daño nos hace. No hemos vencido este reto, pero ciertamente hemos puesto la acción donde está la palabra.
Asignamos más de $9 millones entre fondos federales y estatales para, junto al Comité PARE, dar apoyo a las organizaciones que dan servicios a víctimas, adiestrar a nuestros empleados y primeros respondedores, para el protocolo de la Alerta Rosa y para campañas publicitarias y herramientas digitales. Además, creamos el Centro de Operaciones y Procesamiento de Órdenes de Protección en el que se le da seguimiento, monitoreo y ayuda de la policía, junto a los municipios, a las personas con Ordenes de Protección.
Ordenamos que haya un representante del ministerio público en todas las vistas de este tipo, y en un acto de colaboración gubernamental, esta Asamblea Legislativa convirtió en ley esa iniciativa administrativa.
Y reclutamos 48 fiscales para las unidades especializadas de violencia doméstica, delitos sexuales y maltrato a menores que atienden estos casos en todas las regiones de Puerto Rico. Hoy está aquí con nosotros la fiscal Tasha Cruz, quien es parte integral de nuestra lucha contra la violencia de género. Gracias Tasha, a ti y a todas y todos los que asisten a personas que sufren por este mal social.
Esta lucha nos toca a todos, y juntos vamos a vencerla.
El bienestar social de nuestro pueblo es el norte del Departamento de la Familia. Por eso, espero que esta legislatura finalmente apruebe la ley de Family First para asegurar los fondos que el Departamento necesita para atender a nuestras familias. Tenemos cientos de trabajadores sociales dando el todo por los más vulnerables, por lo que estamos proveyendo más recursos al Departamento para aumentar sus escalas salariales y lograr el reclutamiento necesario que permita atender los retos sociales que tenemos.
Seguimos la lucha por el trato igual en el programa del PAN para que todas las familias que la necesitan reciban ayuda nutricional. Para lograrlo y asistir a nuestra Comisionada Residente, les anuncio que crearé un Comité Multisectorial liderado por la Secretaria de la Familia y en coordinación con la Coalición para la Seguridad Alimentaria, para aunar esfuerzos a favor de que participemos en el programa SNAP en igualdad de condiciones. Y estamos esperanzados por el anuncio del Presidente Biden de que así será.
Hablemos ahora del presupuesto para el nuevo año fiscal y sobre cómo vamos a invertir los dineros del pueblo. Ya ustedes lo tienen y nuestro equipo fiscal se encuentra en el proceso de defenderlo ante la Junta de Supervisión.
Según anuncié la semana pasada, el Presupuesto Consolidado propuesto asciende a $28,785 millones, y consiste de $12,573 millones del Fondo General, $4,976 millones de Fondos Especiales y $11,236 millones en Fondos Federales.
Es importante resaltar que como parte de nuestros gastos para el próximo año, se incluye la partida del pago de la deuda ya reestructurada, así como el primer pago de $1,100 millones al Fideicomiso de Reserva de Pensiones y los fondos para cumplir con las pensiones de nuestros retirados.
Un aspecto importante del presupuesto es que ahora tenemos un aumento de 20% en la nómina pública, al tiempo que reducimos en 13% las contrataciones de servicios profesionales, que tanto nos cuestan. También garantizamos la asignación de $260 millones para las aportaciones adicionales a las cuentas de retiro de nuestros policías, cumpliendo con mi compromiso de darles un retiro digno.
Asimismo, y según me comprometí, estamos haciendo una inversión en aumentos de sueldos y revisión de escalas salariales en prácticamente todos los renglones del gobierno, comenzando con $68 millones para el Nuevo Plan de Retribución del Gobierno.
Además, destinaremos $396 millones entre fondos estatales y federales para el aumento de $1,000 mensuales a nuestros maestros – el aumento más grande que han recibido en nuestra historia.
Y de igual manera incluimos $80 millones para los aumentos prometidos a nuestros oficiales de custodia, paramédicos y técnicos de emergencias médicas, bomberos, enfermeros del sistema de salud pública y el personal del Instituto de Ciencias Forenses.
Más aún, invertiremos en nuevas academias para reclutar 400 nuevos cadetes de la policía y 300 bomberos adicionales. Y para proteger mejor nuestros recursos naturales, estaremos llevando a cabo una academia para reclutar 200 nuevos Vigilantes de Recursos Naturales, algo que no se realizaba desde el 2004.
Finalmente logramos incluir en el presupuesto los $40 millones para el bono de Navidad de nuestros servidores públicos y ya no tendremos que reprogramar fondos a mediados de año para cumplir con ellos.
De igual forma, asignamos $620 millones a la Universidad de Puerto Rico, lo cual incluye la asignación base de $500 millones, la aportación de $51 millones para el Fondo de Becas y asignaciones adicionales por $69 millones más. Con los $10 millones que incluimos en el presupuesto para el Recinto de Ciencias Médicas, más los $10 millones de fondos ARPA que ya le dimos, no existe razón fiscal alguna para que el Recinto pierda su acreditación.
Otro de mis compromisos es asegurar la salud fiscal de nuestros municipios, razón por la cual les asigné $50 millones de fondos ARPA durante tres años. En este presupuesto se mantiene la aportación al Fondo de Equiparación en $88 millones, descartando el recorte de $44 millones que propuso la Junta de Supervisión.
También hemos destinado $58 millones para el Fondo Extraordinario para el Recogido de Desperdicios Sólidos que requiere la Ley 53-2021 e incluimos $164 millones para cubrir la aportación de los municipios al Plan Vital. Y es que como he dicho en repetidas ocasiones, el Plan Vital es estatal, no municipal, y ya es hora de que el gobierno central asuma la totalidad de su costo y deje de minar las arcas municipales.
Por otro lado, además de los acuerdos de colaboración con los municipios, restituimos el Programa de Mantenimiento de Carreteras con $48 millones, adicional a los $25 millones de fondos de ARPA que le hemos asignado para el nuevo año fiscal. Es increíble que por años la Junta de Supervisión prácticamente haya eliminado esos fondos. A fin de cuentas, administración 101 es darle mantenimiento a los activos que tiene el gobierno.
Igualmente y en busca de seguir mejorando la calidad de vida de nuestra gente, hicimos una nueva asignación de $7 millones para combatir la violencia de género, $1.5 millones para reclutar intercesores que acompañen a víctimas en los procesos judiciales, $3.7 millones para iniciativas contra la pobreza infantil, y $5 millones para modernizar las operaciones de ADSEF y apoyar a sus empleados con miras a transicionar de PAN a SNAP.
Y como ya les adelanté, estamos asignando $10 millones para mejorar el plan de retribución del Departamento de la Familia y facilitar el reclutamiento de los trabajadores sociales que tanto necesitamos.
Por otro lado, hemos destinado $4.2 millones para iniciativas que atienden emergencias ambientales relacionadas al cambio climático y la erosión costera, $17 millones para el pareo del proyecto del dragado del Caño Martín Peña, $7.5 millones para servicios de salud mental, $8 millones para el pago del Plan Vital para los policías retirados, $10 millones para la debida acreditación del Centro Comprensivo de Cáncer y $15 millones para mejoras a nuestros hospitales públicos.
Por otra parte, estaremos invirtiendo sobre $25 millones en mejoras a los sistemas del Portal de Permisos de OGPE, en iniciativas de innovación, digitalización y competitividad. La transformación tecnológica del Gobierno que estamos llevando a cabo a través de PRITS es clave y ningún obstáculo que se nos interponga va a poder más que nuestro compromiso.
Por eso también estamos destinando $10 millones para el sistema de contabilidad centralizado; $3 millones para innovación gubernamental con herramientas como Cesco Digital y VacuId, $13 millones para el sistema de Time & Attendance en las agencias; $12 millones para las Unidades de Gerentes de Proyectos y de Manejo de Fondos Federales, así como $1.5 millones para adelantar las iniciativas a favor del trato igual en los programas federales, incluyendo en el Medicaid y la Asistencia Nutricional.
Es un presupuesto ambicioso, y a la vez responsable, que refleja las necesidades y las aspiraciones de nuestro pueblo.
Confío en que esta Asamblea Legislativa, lo evaluará responsablemente para que juntos sigamos asegurando el progreso de nuestro querido Puerto Rico.
He sido bien consciente del mandato de nuestro pueblo. Nuestra gente nos pidió resultados y para eso se necesita colaboración y trabajo en equipo. En este año, en algunas ocasiones hemos demostrado que podemos lograrlo, como por ejemplo en la ley para viabilizar el Plan de Ajuste de Deuda, la ley del salario mínimo y la ley del crédito por trabajo.
Para mí no es importante quién presenta una medida o propone una idea si es buena para Puerto Rico. He firmado 137 medidas y he vetado 44, muchas de ellas con la intención de firmarlas si se atienden errores en su redacción.
Ahora bien, he presentado 76 medidas de administración, y solo 3 se han atendido. Y muchos nombramientos han sido dilatados poniendo en riesgo el trabajo que nuestro pueblo merece.
Nuestra gente eligió diversidad en este cuerpo legislativo, no para que pusiéramos a un partido u otro primero, sino para que pongamos a Puerto Rico primero, para que trabajemos juntos por ese pueblo que nos dio su voto de confianza.
A la hora de legislar, les exhorto a dejar a un lado la política partidista para juntos buscar el bien común de todas y todos en Puerto Rico. Y cuando tengamos diferencias, que sean sobre las ideas y no sobre las personas. Solo así cumpliremos con lo que el pueblo nos ha pedido: acción y resultados.
Finalmente, si hay algo de lo que todos hemos sido testigos en este pasado año, es de la importancia que tiene la igualdad.
Exigimos la igualdad para la mujer insistiendo en igual paga por igual trabajo.
Promovemos la igualdad para cualquier persona sin importar su género, edad, raza, religión u orientación sexual.
Reclamamos la igualdad y la inclusión para personas con diversidad funcional.
Requerimos la igualdad para cada hija e hijo de nuestra tierra.
Sin embargo, llevamos más de 105 años sufriendo de discrimen y tolerando desigualdad como ciudadanos americanos que somos.
Cada vez que tenemos que reclamar mejor trato en los programas federales de salud, se evidencia esa desigualdad.
Cada vez que vamos a pedir que nos incluyan en un programa o una ley, se demuestran las deficiencias de la desigualdad.
Cada vez que dependemos de la buena fe de congresistas de los estados, se comprueba la importancia del voto, de la representación digna y de que hay que estar sentado en la mesa donde se toman las decisiones sobre nuestro futuro.
No debe haber espacio para abogar en contra de la voluntad de nuestra gente; eso es fallarle a la democracia.
Vamos a lograr que el Congreso convoque a nuestro pueblo para acabar con la colonia.
Y vamos a seguir luchando por la Igualdad plena que garantiza la Estadidad.
Hermana y hermano puertorriqueño. Hemos vencido grandes retos. Hemos alcanzado muchos logros. Y nos queda mucho trabajo por hacer juntos.
Yo puedo garantizar que junto a mi equipo de trabajo estamos motivados y decididos a darlo todo por ti y por tu familia.
Hoy les digo que gracias a la resiliencia y fuerza de nuestra gente, del emprendimiento y la innovación de nuestros comercios, la labor incansable del sector sin fines de lucro y de base de fe, y el compromiso de nuestro gobierno, el estado de situación de Puerto Rico es de mucha esperanza, de gran potencial de crecimiento y de progreso imparable.
Y hoy como todos los días de mi vida, le pido a Dios que me dé mucha fortaleza y sabiduría para continuar guiando a Puerto Rico hacia el progreso y la igualdad.
Que Dios les bendiga a todas y todos, y que siga bendiciendo a nuestro querido Puerto Rico.
¡Gracias!