Alimento para el alma

Alimento para el alma

“En Lucas 11:28, Jesús dice: ‘Bienaventurados los que oyen la palabra de Dios y la guardan.’ Qué simple y profundo a la vez. No basta con tener una Biblia en la mesa o con escuchar de Dios solo el domingo. Jesús nos llama a escuchar su Palabra y vivirla cada día.

Leer la Biblia diariamente no es una obligación vacía, es alimento para el alma. Es ahí donde Dios nos habla, nos corrige, nos anima y nos recuerda quiénes somos en Él. Cada página es una oportunidad para encontrar dirección, consuelo y propósito.

Hoy te animo: toma tu Biblia, aunque sea unos minutos. Deja que Dios te hable. No es cuánto lees, es cuánto permites que su Palabra entre a tu corazón. Porque los verdaderamente bendecidos no son solo los que oyen, sino los que guardan y viven lo que Él dice.”