Excelso Danny Rivera desde su balcón

Por Vicente Toledo Rohena
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular

El cantor nacional deleitó al público en su regreso a los miradores de la Fundación Nacional para la Cultura Popular en su puesta ‘Atardecer Navideño’.

Extraordinario y encantador. Las inmediaciones a la sede de la Fundación Nacional para la Cultura Popular (FNCP) en la calle Fortaleza, esquina Del Cristo, se abarrotaron de público para disfrutar de buena música. Luego de dos años de ausencia por consecuencia de la pandemia, el cantor Danny Rivera regresó a los balcones de la FNCP para regalar alegría y felicidad. El evento musical que comenzó a celebrarse el 27 de diciembre de 2013 como un regalo al pueblo, era esperado ansiosamente.

El espectáculo convocado para que Danny cantara mientras caía la tarde, inició tras la breve presentación de Javier Santiago, fundador y director de la FNCP. Un ávido e impaciente público aclamaba la entrada del cantor de ‘Tú vives en mi pensamiento’. Muchos de los que llegaron hasta Viejo San Juan se acomodaron en sus espacios desde más de una hora antes, de comenzar la propuesta musical. Al iniciar los primeros acordes de los músicos: Carlos ‘Pachito’ Vega (director musical, cuatro y guitarra), Oscar ‘Lolo’ Figueroa (batería), Daniela Santos (piano y acordeón), Emma Colón Zayas (percusión) y Luis ‘Wiso’ Vélez (bajo); la gente avistó a Danny. Patricia Vázquez y Yaritza Zayas lo acompañaron desde ese inicio con el coro en ‘Venimos desde lejos’. Un tema tan festivo como éste, definitivamente encendió la concurrencia.

Entre una interacción constante con su gente, Danny se mantuvo comunicado con los presentes que le expresaban frases de cariño y agradecimiento por su salutación sonora. Allí, desde el histórico espacio que desde 2019 ha sido rebautizado por muchos como “calle de la Resistencia”, estrofas del tema ‘Todavía es Navidad’ aumentaban la temperatura hacia un festejo sonoro de contagiosa alegría.

Con palabras que invitaban a celebrar la época más esperada del año en armonía y unidad, el cantor también, se expresó a favor de la defensa de nuestra cultura y tradiciones. De igual manera, saludó a los turistas y visitantes de otros países, que disfrutaban de su música. A parte de diversas personas que llegaron desde diferentes puntos del la Isla, un nutrido grupo de turistas procedentes de varios cruceros anclados en los muelles sanjuaneros- buscaron también sus espacios. Para ellos esta fiesta de pueblo era quizás una de las estampas más coloridas que encontrarían en su breve estadía en el Viejo San Juan.

‘Mañanita campera’ y ‘Qué linda es’ precedieron la trulla de los cánticos tradicionales ‘De las montañas venimos’ y ‘La botellita’. Con este sencillo popurrí, animó a cantar junto a él. El coro masivo se escuchó con emotividad y sensación de euforia. El emblemático corte ‘Jardinero de cariño’ y la solemne ‘Noche de paz’ una vez más recibieron el apoyo de la gente y engalanó la velada.

La siguiente canción ‘De mi voz nació la luz’ del puño y letra del compositor humacaeño Mario Enrique Velázquez (abanderado nacional 2023) sirvió para exponer su invitada especial, la extraordinaria cantora puertorriqueña Chabela Rodríguez. Un junte emotivo que logró generar mucho sentimiento. Ambos intérpretes se vivieron el tema de una manera grandiosa.

Posteriormente, la voz potente y melodiosa de Chabela continuó retumbando por las calles capitalinas con los temas ‘Fiesta’ y ‘Casa abierta’. La cantante cultivó aplausos y vítores constantes con su participación. Chabela logró destacarse por su voz única e incomparable; y la gracia y sencillez que la caracteriza.

‘El tinajero’ y ‘El coquí’ trajeron nuevamente a Danny Rivera a la puesta del público. El cantor aprovechó para agradecer a la Policía de Puerto Rico por la deferencia de mover más hacia La Fortaleza (residencia oficial del Gobernador) las vallas que bloquean el acceso directo a la FNCP desde hace seis años. También destacó la colaboración de la Uniformada en los trámites de ayuda al camión que desde horas tempranas de la mañana descargó los instrumentos y equipo de sonido. Expresiones que previamente, también había destacado el director de la organización cultural en sus comentarios de apertura.

El pedido del intérprete de ‘Amar o morir’ de ser acompañado por un coro masivo nunca se detuvo. Una vez más requirió la ayuda del soberano para los villancicos ‘Pastores a Belén’ y ‘Alegría, alegría, alegría’. Ya comenzaba a caer la luz de la tarde y se acercaba el cierre del espectáculo. Era imposible culminar sin el jubiloso himno ‘El cardenalito’.

‘Plena de amor’ del compositor Roberto Figueroa hizo mover el cuerpo una vez más, antes de la despedida. El insistente y eufórico público pidió la entrada del cantante santurcino; y logró su cometido.

Danny volvió a escena y cantó el pedido de ‘Tu pueblo es mi pueblo’. La gente la cantó, se gozó y finalmente la aceptó como el gran cierre de la noche. Los rostros de alegría y disfrute eran evidentes en el público. Un banquete musical fue lo que disfrutaron. El cantor brilló con su potente y privilegiada voz.

Un regalo de la Fundación Nacional para la Cultura Popular que, definitivamente cautivó a los que llegaron hasta cerca del recinto cultural. Ejemplo de perseverancia y compromiso que durante 26 años, batalla ante viento y marea por proteger y difundir la cultura nacional; y la aportación de nuestros artistas.