Pasadas las diez de la noche del jueves 3 de marzo dio inicio el concierto “La 167” del artista urbano Carlos Efrén Reyes Rosado, mejor conocido como Farruko en el Coliseo de Puerto Rico. Un vídeo describiendo cómo opera la calle fue proyectado como muestra de la transición entre su antes y ahora.
“Gracias por decir presente, ustedes son bien valientes. La pandemia, las vacunas, las noticias de que Farruko se convirtió y muchos se quitaron pero otros llegaron y están aquí. Gracias.” Comenta haberle hecho una promesa a Dios antes del 2010 y su deseo de convertirse en artista. Fue a residir a Miami y Dios le hizo cumplir la promesa y regresó a Puerto Rico convertido en a la fé cristiana para cumplir su propósito.
Abrió la jornada musical con el controvertible tema “Pepas” y un vídeo de personas consumiendo pastillas. Aprovechando la oportunidad para decir que ya está limpio, en clara referencia a que no consume nada.
Continuó con los temas “Jíbaro”, “Borinquen Bella” y “Asignatura pendiente”. Narra sobre su vida cuando residió en la Avenida 167 en Bayamón.
Incluyó los temas “El tiempo pasa”, “Calma”, “Chillax”, “Fantasía”, “Hola beba” y “La tóxica”. Al cantar este último, comenta a las mujeres sobre no necesitar a un hombre, para ser felices, exhortándolas primero a amarse primero a sí mismas. Sigue con “6 AM”, “La bendición”, “Mi forma de ser”, “Que digan lo que quieran de mí”, “Delincuente”, “Real guerrero” y “Nadie” para concluir el concierto con “El incomprendido” y “Gracias”, junto a Almighty.
