Washington, DC – El gobernador Ricardo Rosselló Nevares anunció la firma de un acuerdo con el Negociado de Análisis Económico de los Estados Unidos (BEA, por sus siglas en inglés), para incluir las cuentas estatales de Puerto Rico en las estadísticas económicas nacionales.
Además, se anunció la presentación de una petición al Departamento de Transportación de los Estados Unidos para que autorice la transferencia de carga internacional en Puerto Rico.
“Estos esfuerzos son importantes para el desarrollo económico de la isla. El Negociado de Análisis Económico de los Estados Unidos ahora será la entidad encargada de preparar los informes del producto interno bruto (PIB), los cuales ya incluyen a los 50 estados y a otros territorios. Esperamos que, mediante este acuerdo, Puerto Rico se integre a la economía nacional”, manifestó el primer ejecutivo.
Rosselló Nevares —quien durante el anuncio estuvo acompañado del director del BEA, Brian C. Moyer y el principal oficial ejecutivo de Invest Puerto Rico, Rodrick T. Miller— destacó que uno de los beneficios tras firmar este acuerdo es que se recopilarán más y mejores datos sobre el comportamiento de la economía de Puerto Rico y su respuesta a iniciativas de políticas de desarrollo económico y fiscal; esto incluye los efectos de programas de recuperación de desastres.
Ante esto, el secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), Manuel A. Laboy Rivera, consideró que “el acuerdo con el Negociado de Análisis Económico de los Estados Unidos mejorará la competitividad de Puerto Rico como una jurisdicción de inversión, proporcionando una mayor confianza a los inversionistas”.
Por otro lado, la Administración Rosselló Nevares realiza esfuerzos por medio del DDEC y en el Congreso —bajo el liderato de la comisionada residente Jenniffer González Colón— para lograr que Puerto Rico pueda transferir carga internacional en sus aeropuertos.
Por esto, el DDEC presentó recientemente una solicitud al Departamento de Transportación de los Estados Unidos para que autorice a Puerto Rico a transferir carga internacional de aviones grandes a aviones más pequeños para su distribución a Estados Unidos, a fin de combinar carga doméstica e internacional.
Esto generará la creación de empleos y una mayor venta de combustible, atraerá nuevas líneas aéreas y potenciará mercados secundarios a la industria.
El permiso se solicitó para todos los aeropuertos internacionales que existen en Puerto Rico en Aguadilla, Carolina y Ponce.
El secretario del DDEC explicó que “hay una gran cantidad de aviones que sobrevuelan nuestro espacio aéreo y debido a las restricciones actuales no usan la isla como parada. Tenemos una posición geográfica estratégica para beneficiarnos de los vuelos provenientes de, no solo América Latina, si no de África y sus regiones”.
Laboy Rivera puntualizó además que “el Gobierno necesita desarrollar nuevos sectores económicos que no dependan tanto de incentivos ni subvención económica y, mediante la autorización de transferencia de carga doméstica e internacional, tenemos una gran oportunidad”.
Mientras, la comisionada residente manifestó que “me alegra saber que se logró firmar el acuerdo con el BEA. Desde el Congreso he estado trabajando incansablemente sobre este tema a través del H.R. 1405 conocido como el Puerto Rico Data Collection Equality Act, medida que ayudará a abordar adecuadamente las necesidades de los 3.2 millones de ciudadanos americanos que residen en la isla al simplemente exigir que las agencias de estadísticas federales nos traten por igual, un problema que hace mucho que se debe atender”.
Por otro lado, la funcionaria explicó que el pasado 25 de abril presentó nuevamente el H.R. 2357, el Puerto Rico Air Cargo Industry Empowerment Act, para agregar a Puerto Rico a la enmienda Stevens, que ha sido transformadora para la comunidad de Anchorage y el estado de Alaska.
“Continuaré trabajando con este tema desde mi posición en el Comité de Transporte e Infraestructura de la Cámara de Representantes federal, que tiene jurisdicción sobre las reglamentaciones de la carga aérea, con la secretaria de Transportación federal Elaine Chao y el gobernador Rosselló Nevares como medio para agregar diversidad de la economía de la isla y como medio de desarrollo económico y empleos para todos los puertorriqueños”, añadió González Colón.
Por último, el secretario del DDEC explicó que Puerto Rico tendría grandes ganancias de recibir la autorización del Departamento de Transportación de los Estados Unidos y utilizó como ejemplo el estado de Alaska.
Explicó que, cuando a ese estado se le eliminaron las restricciones de cabotaje de aire, se crearon unos 20,000 puestos de trabajo en el aeropuerto y actividades relacionadas.
De acuerdo con el presidente de Northwest Airlines Cargo y experto de la industria, Jim Friedel, un nuevo vuelo del extranjero por día genera aproximadamente 90 puestos de trabajo adicionales en Alaska.
Según un informe de Estudios Técnicos, Inc., esto sugiere que, si Puerto Rico es liberado de las restricciones de cabotaje, de forma conservadora generará unos diez nuevos vuelos por día, lo que crearía hasta 900 nuevos puestos de trabajo y un aumento en la nómina de unos $30 millones.