Luis Rigoberto Varela hoy te cuento yo

Te cuento… y tú me cuentas” Luis Rigoberto Varela

Te prometo que te recordaré jovial, parlanchín, consejero, y por admiración.

No salgo de mi asombro. Pensé que no iba a pasar, porque siempre salías ganando de las grandes batallas con la salud. Nuevamente te fuiste sin avisar.

No escucharte desde el 2017 en las ondas radiales de WEUC 88.9 y 89.1 FM, todos los medios días y los sábados en la mañana, fue un duro golpe al periodismo deportivo nacional y de la región del sur de Puerto Rico. Tu ímpetu por atender los temas de la Liga Atlética Interuniversitaria y montar una que otra controversia de Grandes Ligas era un honor para mí decirte que sí y, a su vez, de muchos nervios porque mi intervención estaba cargada de responsabilidad por la presión que sentía al estar contestando tus preguntas.

Te cuestioné el porqué de tu despedida de la radio y me dijiste:

 “Zacha Guayanilla, quiero ver a mis nietos crecer. Llevo 55 años aquí (Trinchera Deportiva)”.

Después de tu huida, fue huida porque no dejaste que te diéramos fiesta de despedida, te comentaba el vacío que habías dejado. El pase de batón fue para Pedro Carlos Lugo y Rei Millán que hicieron su mejor trabajo.

Aun así, el “Te cuento… y tú me cuentas” era una frase ícono en cada introducción de tus entrevistados, por lo que se extrañaba en el nuevo rumbo de los medios días.  Las sorpresas que dabas con el “¿Hay cake o no hay cake?”, haciéndonos reír para luego retomar la conversación.

Son muchas las historias que puedo contar contigo. Desde los “paquetitos” para llevarle “a la familia en Cuba” en cada viaje que podía tener por la esgrima y/o de otros compañeros de delegación. Siempre buscando hacer el bien para los tuyos.

Hoy, martes, 23 de junio de 2020, en la celebración del Día Olímpico Internacional decides marcharte a las 7:09 p.m. como todo un campeón. ¡No es para menos! Fueron cinco Juegos Olímpicos de cobertura en excelencia: Montreal 1976, Moscú 1980, Los Ángeles 1984, Atlanta 1996 y Sindney 2000. Haber sido tinta privilegiada de unas de las agencias periodísticas más prestigiosa del mundo, Prensa Asociada, y el periódico regional, la Perla del Sur.

No salgo de mi asombro todavía. Ni estas líneas me ayudan para aceptar tu partida.

Solo tengo palabras de agradecimiento, porque puedo decir que con honor me seguiré llamando como me bautizaste “Zacha Guayanilla, la hija de Junior Mayagüez y de su mamá Ivonne”. Siempre con la distinción de enviarle un saludo a mi familia y vecinos en el barrio Playa de Guayanilla. Mi papá no se equivocó en decirme que siguiera tu ejemplo. Estoy segura que también a él le duele tu partida, como a mi mamá y todos su compañeros del programa Head Star en Ponce y a mi hermano Cecilio, que admira tu programa y me llamaba para contarme de tus ocurrencias.

¡Gracias Luis Rigoberto Varela por tu excelencia periodística y calidad humana! Dale un apretón a Don Joaquín Martínez Rousset y su hijo Avelino Muñoz y al consentido Elliott Castro.