Por: Luz Enid Díaz Torres
El pasado domingo 10 de marzo en el Coliseo de Puerto Rico se presentó el cantante malagueño, Pablo Alborán. El venue en modalidad de teatro y completamente lleno de su seguidores y fanáticos disfrutaron de un gran concierto. El espectáculo musical fue una celebración al amor y a la amistad, donde el artista no solo demostró su versatilidad, talento y carisma.
El concierto inicia casi a las nueve de la noche, con un repertorio de casi una treintena de sus más conocidas canciones, éxitos y los temas contenidos en su más reciente álbum titulado La Cuarta Hora. Un video del Alborán en lo cotidiano del artista, como introducción muestra su humanidad, sencillez y gran artista para dar paso al primer tema de la noche “Carretera y Manta”, seguido de “No Vaya a Ser”. Con un muy entusiasta “esta noche es nuestra, nuestra y única noche” no solo saluda a la audiencia sino que expresó lo significativo y especial de este concierto. Puesto que concluye con su gira mundial, “una de sus favoritas”. Agradeció el cariño recibido, y comentó haberse dado un paseo por el Viejo San Juan, el sábado 9, donde pudo bailar y disfrutar de la gente.
Pablo Alboran - Foto por: Teresa Orriola
La especial conexión y magia que se sintió en las casi dos horas de duración del concierto, eran casi palpables. Pablo Alborán es un gran artista con los pies muy bien puesto sobre la tierra. Sabe perfectamente con su afabilidad y picardía trasmitir ese sentimiento que tiene cada letra de sus canciones. El cantautor, músico y compositor deleitó con su voz en los temas “Tabú”, “Voraces”, “Tu Refugio”, “Si Hubieras Querido” y “Saturno”. Guitarra en mano para el momento acústico de la noche, Pablo trajo el éxito “Solamente Tú”, dedicado a sus fans, Legión de Ángeles y a todos los soñadores y “Perdóname”.
En este viaje de sonidos, letras y sentimientos, Pablo Alborán estuvo acompañado por cuatro extraordinarios músicos que junto a él llenaron totalmente el espacio de este recinto. Su musicalidad, sonoridad y acoplamiento manifestaron las armonías, cadencias y ritmos que hicieron vibrar cada ser presente. Un Pablo coqueto, juguetón, amigo se hizo sentir muy cercano a cada fanático y admirador que asistió. Quienes no dudaron, ni un minuto en acompañarle a cantar cada canción.
La voz de Alborán se distinguió en temas como “Que Siempre Sea Verano”, “El Traje”, “Recuérdame”, “Dónde está el amor”, “Pasos de Cero”, y “Ave de Paso”. Incluyó además, “Viaje a Ningún Lado”, “Miedo”, “Por Fin”, “El Mismo Aire”, “Quién”, “Tanto”, entre otros. Como lo había estado haciendo en sus otros conciertos, trajo el tema inédito “Si quisieras”, “un merengue a su manera”, como expresó y con el que invitó a todos a bailar. Cerró esta fantástica gira musical con las canciones “Vívela”, “Llueve sobre Mojado”, “Amigos” y “La Fiesta”.
